Últimamente nos estamos acostumbrando a la palabra Crisis y Economía hasta el punto de que ocupan casi todos los días los medios informativos de manera que es habitual en nuestras conversaciones y todo el mundo da su opinión correspondiente. Eso, cuando se convierte en crónico no es una buena compañía ya que podría indicarnos que nos estamos acomodando a esas condiciones que, para nada, son las que se merece el ser humano civilizado pero que amenaza con hacerse crónica lo que dificulta la capacidad de reacción inmediata de las personas afectadas.
En la naturaleza hay muchos ejemplos de coexistencia entre especies que se respetan
Y es que estamos tan “Liados” con nuestras cosas: el trabajo, las hipotecas, la familia, la misma economía, que no nos damos cuenta de que nos tratan de engañar para continuar con los mismos y caducos sistemas de gestión hasta ahora en vigor y que han dado al traste en poco tiempo con la economía de toda una Nación.
Como no soy economista, ni experto en estos oscuros y manipulables sectores de la sociedad, me voy a limitar a añadir un concepto que quizá, por egoísmo no se había tenido en cuenta y, sin embargo es vital ya que está avalado por las leyes naturales que, en mi opinión me suscitan mayor confianza avalada por los millones de años de experiencia frente a los pocos años de estos “listillos seudo- políticos actuales”, que no es otra cosa de la Ley de la Retribución.
Ley de la Retribución de Energía
Es lo que entendemos más parecido a la Simbiosis ó colaboración entre especies para preservar el hábitat. En cualquier documental de la 2 A LA HORA DE LA SIESTA, podemos ver cómo animales de distintas especies hacen posible la subsistencia entre sí simplemente aprovechándose unos de otros, por ejemplo:
Ciertos perros salvajes comen en Sudamérica frutos de un árbol plantado casi en el desierto, al comer los frutos éste hace sus defecaciones alrededor del árbol en un montículo que, las hormigas del lugar se llevan los restos de semilla que no digiere el Perro y los transportan a otro lugar, algunas de las cuales germinarán haciendo así que se extiendan aumentando la vegetación que, a su vez, generará el abono necesario para que sobrevivan las tres especies entre sí. Es decir toman o se aprovechan de la naturaleza pero siempre restituyen alguna de sus transformaciones.
Si son ansiosos, que cogen lo que necesitan nada más y dejan siempre algo a cambio
El Hombre se excede en tomar las cosas de la naturaleza pero no reintegra nada a cambio, como mandan las leyes universales para mantener el equilibrio ecológico, lo que hace es devastar, consumir exageradamente hasta que acaba con la riqueza y luego se marcha a otro sitio como si tal cosa dejando diezmados los terrenos o las arcas del estado.
Así podemos citar casi todos los casos ecológicos en los cuales los animales del lugar, las plantas y la tierra mantienen el equilibrio entre sí, excepto cuando llega el hombre con el ansia de producción que se lleva todo pero no deja nada a cambio.
¿Cómo es esto aplicado a nuestro modo de vida?
- Cuando se labra la tierra y se recogen sus frutos lo ideal era volver a sembrar con otros productos para que no se empobreciera el terreno y mejorará su riqueza mineral, eran los llamados cultivos rotativos. Yo me llevo pero dejo a cambio otra cosa que a su vez va en mi beneficio.
- Cuando talo árboles debería sembrar en la misma proporció n o mayor.
- Cuando los hijos trabajan, una vez han aprovechado las enseñanzas de maestros y Padres, solían ayudar con su dinero o su trabajo a la familia, si vivían con ellos, y a la sociedad retribuían con sus nuevos conocimientos y experiencia enriqueciendo y mejorando la subsistencia en general
- Cuando un político se hace cargo de un país, autonomía o municipio, debería pensar que, cuando termine su mandato, debe dejar mayor riqueza, mejores servicios y la vida de los ciudadanos en mejores condiciones que las que se encontró.
Así podríamos citar multitud de ejemplos en nuestro entorno personal, social y natural porque es la única manera de mejorar la creación y seguir la evolución natural. Otro gallo cantaría entonces, no? …
Las Enseñanzas de Yoga lo tienen claro
La puyá es un ritual religioso realizado en una amplia variedad de ocasiones para presentar respeto a ídolos.
En Yoga es parecido a lo que llamamos el Ânga (Técnica ó disciplina) Puyá que no es más que esa retribución de energía al escalón superior que termina siendo un acto de sintonía entre ambos,
Los Puyá son ceremonias de ofrendas hacia los dioses por su protección
normalmente se hacen cuatro:
- Los alumnos hacia la clase, compañeros, etc.;
- Hacia el instructor de manera recíproca, lo que crea una sintonía entre ambos lo que regenera la energía de éste;
- Hacia el Maestro fundador de la escuela o estilo de que se trate, lo cual mantiene la protección de la Egrégora de la Escuela y
- Hacia el Origen del Yoga Universal Sivá.
Con esto lo que se consigue es mantener la energía y el intercambio de la misma entre todos los participantes que reconforta a todos y alimentan el amor hacia los alumnos y estos inspiran la continuamente la energía del instructor.
Así que, recordemos siempre que nada es nuestro, en realidad, sino utilizamos las maravillas de la creación y, a cambio, reintegramos a la misma el fruto de la transformación p articul
ar nuestra con lo que contribuimos a un constante y verdadero crecimiento.
Comparte y disfruta este post con otros si te ha gustado. Coméntalo para enriquecerlo con tu opinión.
Namasté
El Ojo del Tigre 